Las tropas nativas victoriosas llena de ímpetu y el pecho henchido, acorralaban y derrotaban a los franceses de Ferrand y este desmoralizado se suicidó,  debido a que ya había perdido en batalla más de 300 hombres. Luego del suicidio el valiente Capitán Pedro Santana y Familia quien tenía varios años en el Seibo, después de llegar del pueblo de Hincha y era de la oficialidad bajo el mando del General Sánchez Ramírez, le corto la cabeza a Ferrand y la paseo enganchada en su sable por la ciudad del Seibo montado en su caballo. Sus hijos mellizos Pedro y Ramón tenían 8 años de edad. Antes de empezar esta batalla el General Sánchez Ramírez arengo al personal y le dijo la siguiente frase ¨PENA DE LA VIDA PARA EL TAMBOR QUE TOCARE RETIRADA, PENA DE LA VIDA DEL SOLDADO QUE VOLTEARE LA CARA HACIA ATRÁS Y PENA DE LA VIDA AL OFICIAL QUE LO MANDARE AUN SEA YO MISMO¨. Luego de la perdida de esta batalla por parte de los franceses y la decapitación de su liderazgo prosiguieron algunas escaramuzas entre las tropas que habían reivindicado el orgullo nacional españolizado y las tropas Imperiales Galas, pero se rindieron el 11 de julio del 1809. Antes de su rendición España les había pedido ayuda a los ingleses y estos enviaron al Sir Hugh Michael y al Comodoro William Price, quienes aportaron gran ayuda en el final del conflicto a los españoles. En ocasión de la lucha contra los franceses después de Palo Hincado hubo una reunión o un conclave donde los revolucionarios discutían  la adhesión a España nueva vez, pero el valiente  Coronel Ciriaco Ramírez, nativo de Azua, se oponía a que nos colonizáramos nueva mente y planteaba crear una patria con soberanía y libertad con sus propias leyes políticas, esto le creó un conflicto con el General Juan Sánchez Ramírez que termino deportándolo a Puerto Rico en el año 1810, este conclave fue en Bondillo zona de Pantoja hoy día.